El embarazo es, sin duda, una de las experiencias más importantes de la vida de una mujer. Durante este periodo, y tanto antes como después de dar a luz, es importante que la mujer cuide su salud física, ya que el embarazo no debe ser una excusa para no hacer ejercicio. Mantenerse en forma y cuidarse es esencial en cualquier etapa de nuestra vida. Siempre que se tenga especial cuidado y se sigan las recomendaciones indicadas por los médicos, realizar natación, al menos media hora diaria, es una actividad que proporciona numerosos beneficios para las embarazadas.
Y es que, si la mujer está en una fase avanzada del embarazo, no es necesario realizar ejercicio a diario. Lo importante es que se mantenga activa y realice ejercicio como mínimo tres veces a la semana. Y es ahí donde entra en acción el destacado papel que cumple la natación durante el embarazo y el postparto.
La natación proporciona múltiples beneficios a las embarazadas
Raquel Nogales, Técnico deportiva y entrenadora de natación del Centro Deportivo Amanecer, asegura que, entre los principales beneficios que la natación proporciona a las mujeres durante su embarazo, podemos destacar los siguientes:
- La actividad física en el agua favorece mucho la libertad de movimientos, sin apenas impacto. Esto es muy importante para las mujeres a partir del tercer trimestre de su embarazo, que es cuando más volumen tienen de peso y su punto de gravedad está más desplazado.
- Descomprime y relaja articulaciones, rodillas, tobillos y, sobre todo, la columna vertebral.
- Mejora sustancial del nivel cardiovascular y de la circulación: es un ejercicio aeróbico continuo y poco intenso, por lo que no induce a la fatiga excesiva.
- Tonificación muscular de brazos, piernas y espalda.
- Mayor energía durante el día, ayudando a dormir mejor.
- Mantiene un peso ideal.
Tal y como destaca Raquel, las mujeres suelen cuidarse “bastante más durante en el embarazo que en el postparto y es muy importante que, pasados aproximadamente tres meses de parto, vuelvan a tener actividad física para recuperar el tono”.
Es muy importante la práctica deportiva durante el embarazo y después del parto
Por ello, es fundamental cuidarse después del parto, por todos los cambios a nivel fisiológico y anatómico que conlleva el embarazo y el parto. Y, en este punto, el ejercicio físico en el agua viene muy bien para volver a tener un buen fondo, mejorar la capacidad aeróbica, la resistencia cardiovascular y la tonificación muscular, a nivel abdominal y del suelo pélvico.
A la pregunta de si la práctica de la natación ayuda a tener un mejor parto, Raquel asegura que, “en términos generales, por supuesto que sí, ya que fortalece la zona de la cadera y abdomen, mejora la capacidad aeróbica, la resistencia muscular, etc, por lo que, evidentemente, el parto irá mejor”, subraya.
Las sesiones, tanto de natación para embarazadas como postparto, tienen una hora de duración, empezando, siempre, por un calentamiento. La natación preparto se desarrolla, prácticamente en su totalidad, dentro del agua, mientras que la postparto tiene una parte “en seco” y otra en agua, tal y como explica Raquel: “En la parte de seco, fuera de la piscina, hacemos un trabajo de recuperación del suelo pélvico, glúteos y zona abdominal, así como un trabajo de recuperación de la respiración y de reeducación postural, ya que durante el embarazo sufren la columna y la espalda. Después, el trabajo en el agua consiste en ejercicios enfocados a la resistencia muscular, mejora de la capacidad aeróbica y de la condición física en general”.
Y es que, conviene recalcar que la recuperación postparto es más sencilla si antes, durante el preparto, se ha realizado una actividad física.
Así pues, si estás embarazada o acabas de dar a luz, te esperamos en el Centro Deportivo Amanecer, donde ponemos a tu servicio las mejores instalaciones para tu práctica deportiva, así como el mejor asesoramiento personal y deportivo, de las manos de nuestros profesionales, específicamente preparados para la actividad acuática.
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